Toda consulta veterinaria debe ir acompañada no solo de una buena anamnesis, sino, también de una buena exploración física del paciente.
Con ello se podrá detectar cualquier tipo de alteración, proporcionando así información para poder completar un estudio y llegar a un diagnóstico final.
La exploración física puede realizarse de craneal a caudal o de manera inversa siempre y cuando todo quede correctamente explorado, valorando:
1–Mucosas: son los tejidos de transición entre la dermis y el sistema interno, zonas muy vascularizadas, por lo que es fácil observar la circulación sanguínea periférica. Valorando la mucosa oral, conjuntival o genital. No solo es importante valorar el color de dichas mucosas, sino también, su hidratación. Las alteraciones colorimétricas más comunes que se pueden encontrar en la valoración de las mucosas son:
- Mucosas rosadas
- Mucosas ictéricas: amarillas
- Mucosas cianóticas: azules
- Mucosas pálidas: blancas
2–Tiempo de relleno capilar: valora la capacidad del sistema circulatorio para rellenar de sangre el sistema vascular. No debe superar los 2 segundos.
3–Pliegue cutáneo: ayudará a conocer el grado de hidratación.
4–Gánglios linfáticos: no solo se observa su consistencia sino el tamaño de dicho ganglio. Deben ser explorados de forma simétrica valorándolos de manera individual.
- Ganglios submandibulares
- Ganglios pre escapulares
- Ganglios axilares
- Ganglios inguinales
- Ganglios poplíteos
5-Auscultacion cardiaca: la auscultación se realizará con un fonendoscopio, que permite escuchar los sonidos internos. Debería realizarse con un ambiente tranquilo y calmado. En una auscultación lo que vamos a valorar es la funcionalidad de las válvulas cardiacas, su cierre y apertura, para ello es necesario explorar ambos hemitórax y conocer la anatomía cardiaca. No solo se valorará la funcionalidad de las válvulas sino, la frecuencia cardiaca.
Dentro de las alteraciones que se pueden encontrar están los soplos. Aquellos sonidos turbulentos procedentes de una incorrecta funcionalidad valvular, o las arritmias, aquella alteración en el ritmo cardiaco.
6–Aucultacion pulmonar: es importante conocer la estructura anatómica de los pulmones para así poder realizar una auscultación correcta de ambos hemitórax y de todos los lóbulos pulmonares. Se realizará con el fonendoscopio de la misma manera que en la auscultación cardiaca. En este caso, no solo se valorará los ruidos pulmonares, también la frecuencia respiratoria y el patrón respiratorio del paciente durante la inspiración y expiración.
Son muchas las alteraciones pulmonares que pueden ser escuchadas tales como: crepitaciones, refuerzo inspiratorio, roce pulmonar, sibilancias…
7-Palpación abdominal: se presionará a ambos lados del abdomen de caudal a craneal observando las posibles reacciones que presenta el paciente determinando su grado de dolor abdominal. Durante la exploración abdominal podemos diferenciar los distintos órganos abdominales y valorar su tamaño y morfología. Es importante fijarse en las señales que nos manda, la postura que adopta, posibles vocalizaciones…
8-Pulso: se trata de la pulsación provocada por la expansión de las arterias cuando la sangre pasa por los vasos al ser bombeada por el corazón. Colocaremos nuestro dedo índice sin presionar solo apoyando, de manera simétrica en ambas arterias. Valoraremos si es fuerte, rítmico, igual, sincrónico y simétrico. En una exploración básica el pulso se evalúa en las arterias femorales.
9-Catéteres endovenosos: es necesario ser vigilados y chequeados con frecuencia para evitar extravasaciones, flebitis… evitando dejar un catéter más de 72 horas.
10-Temperatura: control regular de la temperatura para evitar cambios o desajustes bruscos.
11- Exploración visual: en ella se valorará el aspecto y estado del paciente. Estado de musculatura, complexión física y peso, la calidad del pelo y el estado anímico.
Es necesario valorar con la misma importancia cada uno de los puntos citados con anterioridad, así como cualquier tipo de detalle que el paciente muestre, tanto en una exploración general de una consulta, como en una exploración general durante un periodo de ingreso hospitalario. Cualquier dato es importante a tener en cuenta para un buen diagnóstico y seguimiento.
