Existen muchos puntos clave para hacer la de la UCI una estancia más llevadera. Es un lugar en el que trabajamos bajo mucha presión, que nos obliga, en muchísimas ocasiones a actuar de una manera rápida y precisa, que nos obliga conocer los tipos de urgencia, identificar cambios en los pacientes, identificar el dolor, ser capaces de tomar decisiones (siempre bajo la supervisión de un compañero veterinario), es decir: tener mil ojos. Para hacer todo esto de una manera más sencilla, como ATVs coordinadores de una UCI, debemos establecer unas bases para que todo funcione correctamente en el día a día. Tendremos muy presentes las claves que queremos implantar, tanto nosotros como todo nuestro equipo. Nuestra función, independientemente de supervisar que todo va funciona correctamente, dirigir las tareas, etc, también se basa en la formación de los/as auxiliares. Apoyaremos, enseñaremos y acompañaremos a nuestro personal en todo el camino.
¿Qué puntos vamos a tratar?:
- Orden y limpieza de la UCI
- Organización y optimización del tiempo
- Compromiso de cada uno de los miembros del equipo
- Programa de hospitalización
- Trabajo en equipo y confianza
- Creación de protocolos
Por aquí empieza todo: por el orden y la limpieza de toda la estancia. Es básico tanto para trabajar y desarrollar nuestras funciones correctamente, como para que los animales estén en las condiciones óptimas para una pronta recuperación.
Tendremos las herramientas y materiales a mano, así como las jaulas siempre limpias. Automáticamente tras dar las altas, limpiaremos a conciencia las jaulas para poder recibir otros pacientes en cualquier momento. Así como limpiaremos y después desinfectaremos las jaulas de animales infecciosos con el protocolo adecuado. Esto es algo que debemos inculcar a nuestro equipo.
Por otro lado, tener el material ordenado va a hacer que cualquier maniobra de urgencia sea un poco más sencilla. Si todos ponemos un poco de nuestra parte y dejamos todo en su sitio y evitamos el desorden, conseguiremos tener una UCI perfecta para trabajar a gusto. Como coordinadores, antes de finalizar nuestro turno nos aseguraremos de que cada persona ha hecho lo posible para que todo esté en orden y se pueda dar comienzo al siguiente turno sin arrastrar desorden.
En cuanto a la organización y a la optimización del tiempo, debemos ser conscientes de que en muchos hospitales disponen de personal cuya jornada laboral está destinada al 100% a la hospitalización o UCI, pero también es habitual encontrarse con centros en los que el equipo auxiliar es el mismo tanto en UCI como en las demás estancias del hospital. Por tanto, es esencial establecer una organización del trabajo y que cada uno, de manera individual, sea capaz de optimizar su tiempo. El coordinador/a debe ser el encargado de repartir este trabajo según las habilidades de cada ATV. Y, en cuanto al auxiliar de UCI, una vez asignado su puesto, debe plantearse varias preguntas al inicio de su jornada:
- ¿Qué es lo que tengo que hacer hoy?
- ¿De cuánto tiempo dispongo para cada tarea?
- ¿Cómo lo voy a hacer?
Lo primero necesario para ser capaz de responder cada pregunta es un conocimiento total del modo de trabajo del centro, concentración y una muy buena disposición al trabajo: Es vital evitar las distracciones.
También debemos conocer como la palma de nuestra mano el sistema de trabajo, ya sea programa informático de hospitalización o papel.
Conoceremos los pacientes, sus patologías y el plan de trabajo de cada uno de ellos. Apuntaremos todos los puntos clave de los pases de información. Junto a los veterinarios, debemos trabajar como un solo equipo de profesionales que buscan un objetivo común: el bienestar y la curación de los animales hospitalizados.
Por otra parte, el compromiso es algo necesario en todo el ámbito del hospital. En la hospitalización necesitamos un equipo comprometido, formado y entregado. Nuestros compañeros auxiliares deben ser conscientes del trabajo que tienen entre manos y somos los responsables de explicar, inculcar, responder…
Nos debemos comprometer a tener los 5 sentidos en cada uno de estos animales y tendremos un equipo entregado y dispuesto a actuar en cualquier momento. Las personas que decidamos que estén con nosotros en esta zona del hospital deben comprometerse a monitorizar, medicar, limpiar… Todo esto con todo el mimo del mundo, ya que son animales que necesitan todo nuestro cariño a la hora de realizar cualquier procedimiento con ellos.
En otro orden de cosas, hablaremos de cómo gestionamos la hospitalización: ¿Pro-papel? O ¿Pro-programa informático? Muchos softwares veterinarios o de gestión de clínicas incluyen un módulo de hospitalización e incluso hay programas especializados sólo en la organización de la hospitalización. Hablaremos de los inconvenientes que presenta el papel y que solventa el programa informático.
En relación al trabajo en equipo, hablaremos en primer lugar de la confianza. Si no confiamos, nos vamos a intentar ocupar de todo, siendo incapaces de delegar, lo cual nos va a llevar a cargarnos con todo el trabajo y, a la larga, no podremos ser un buen líder. Conoceremos las capacidades y las habilidades de cada auxiliar, y de esta forma, podemos delegar esa porción de trabajo en él/ella y cada uno será una parte esencial para el correcto desarrollo del trabajo.
Por último, pero no por ello menos importante, vamos a hablar de establecer protocolos.
Debemos asegurarnos de que todo esto, aquello que funciona, queda instaurado en nuestra UCI por sistema. Los presentaremos, defenderemos y actualizaremos en cada reunión.
Un buen líder acompañará y guiará en todo el camino a su equipo, asegurando el bienestar de los animales y de sus propios compañeros. Será un líder consciente, despierto y respetado. Desarrollará sus competencias constantemente e incluirá al equipo en la toma de decisiones. Enseña, comparte, ayuda a crecer, porque en algún momento lo hicieron contigo.