Tubos de muestras en el laboratorio

Unas de las tareas más habituales de los auxiliares es la toma de muestras y gestión de analíticas, de manera que tenemos que conocer los diferentes tubos y para que se utilizan.

Antes de su uso, deberemos guardarlos en un lugar protegido de la luz solar directa y de los cambios bruscos de temperatura, ya que éstos podrían disminuir o eliminar sus propiedades conservadoras y/o  anticoagulantes. Además, deberían estar en un lugar resguardado para evitar que se ensucien con polvo, pelos… pero a su vez accesible, ya que los utilizaremos muchas veces al dia.

Una vez que obtengamos la muestra deberemos rotular los tubos con su nombre y su número de historial, así como rellenar la solicitud con todos los datos del paciente. Es muy importante que no descuidemos esta parte, ya que el riego de pérdida de muestras o de intercambio entre varios pacientes es habitual si no las rotulamos adecuadamente. Además, si las dejamos en una mesa mucho rato a temperatura ambiente pueden dañarse.

Existe un código internacional de colores que nos facilitan visualmente escoger el tubo adecuado sin tener que estar mirando las etiquetas.

  • LILA: Tubos con EDTA (AcidoEtilen Diamino Tetracético) que se utilizan para hemogramas (recuento celular que hay en la sangre). Normalmente no se centrifugan, pero a veces algunas pruebas especiales requieren centrifugar para obtener el plasma de la muestra.
  • VERDE: Tubos con heparina de litio que impiden que la muestra coagule. Se utilizan para bioquímica y obtenemos la muestra rápidamente.
  • ROJO O CRISTAL: Tubos que no tienen anticoagulante sino o bien gránulos, gel o bien nada. Esta muestra coagula y obtenemos suero. Se utiliza para bioquímica, hormonas, serologías….
  • AZUL: Tubos con citrato de sodio que se utilizan para pruebas de coagulación, ya que inhibe el paso de protrombina-trombina.

Además, encontramos otros recipientes:

  • Portaobjetos-cubreobjetos: Superficie de cristal que nos permite ver una muestra en el microscopio. El cubre lo usamos con 100X.
  • Hisopos: Bastoncillo que se utiliza para recoger muestras de superficies o cavidades y poder extenderla en un portaobjetos. Son estériles y en envases de 1 unidad.
  • Hisopos con medio Stuart: Son hisopos estériles que se utilizan para recoger una muestra y cultivarla. Se compone de un hisopo y un bote con tapón. Su recogida tiene que ser exacta y limpia, para evitar contaminaciones y que crezcan colonias en el cultivo iatrogénicas.
  • Botes de orina: estériles, se utilizan para tomar una muestra por micción espontánea.
  • Botes de biopsias: Contenedores de diferentes tamaños, la muestra tiene que entrar fácilmente y cubrirse con formol adecuadamente, de lo contrario no se conserva bien para su posterior análisis.
  • Pipetas: se utilizan para coger la muestra una vez centrifugada y pasarla a un tubo limpio.
  • Eppendorfs: pequeños tubos con tapa que se utilizan para poner el plasma o suero una vez hemos centrifugado la muestra.

 

   

 

 

 

 

 

 

Todas las muestras sanguíneas se deberían conservarse en nevera para analizarlas en su estado óptimo, en el caso del suero y plasma, si se van a analizar tras más de 6-8 horas podemos centrifugar y congelar, y así no hay riesgo de que se alteren algunos resultados.

En el caso de la coagulación, la muestra se ha de analizar antes de 15 minutos, de lo contrario deberemos separar y congelar el plasma resultante.

En cuanto a los cultivos, también deberán guardarse en nevera para evitar el sobrecrecimiento de bacterias a temperatura ambiente.

Todo los que son biopsias se pueden dejar a temperatura ambiente siempre y cuando estén bien cubiertas con formol.

Recordad que siempre podéis consultar con vuestro laboratorio qué tipo de muestra y cantidades necesitan, ya que en ocasiones podemos solicitar analíticas poco comunes o muy específicas las cuales no estamos habituados a procesar.

ATV, Coordinadora ATV en Hospital Clínico Veterinario UAB